Un paseo de 20 minutos --- 10.06.2015 El vuelo de Oslo fue puntual. Su duración también fue precisa: 1h 30min. La duda me asaltó en cuanto salí del avión en el aeropuerto de Bodø: ¿Dónde está el servicio?
La siguiente misión después de vaciar la vejiga consistió en encontrar información referente a mi siguiente vuelo. ¡El viaje no había terminado! Llegado el momento anunciaron el vuelo y todos los pasajeros embarcamos... los 15 pasajeros.
Tuve que parar la grabación antes de aterrizar debido a las numerosas turbulencias. El fuerte viento mecía la pequeña cafetera voladora. Por cierto, me encantó el aeropuerto- un sitio sin complicaciones: una habitación. El vuelo Bodø-Leknes fue cortito, tardó apenas 20 minutos en recorrer unos 100km. El ferry desde Moskenes tarda casi 4 horas en recorrer una distancia similar.
Es un lugar muy conocido, de los más fotografiados del país. Lo que pasa es que la horda de turistas llega en verano, no en invierno.
...Y la solución es... ... ... Claro que sí, el púlpito: Preikestolen.
Es el lugar de moda. Empecé el año hablando del lugar y ahora (bueno en marzo) vuelve a ser noticia porque Google ha realizado la excursión para que el mundo pueda disfrutar el panorama sin salir de casa.
En alguna sobra que otra es posible distinguir la sombra de una persona cargada con una gran mochila de la que sobresale una especie de tubo; la silueta de una cámara panorámica.
¡Saltando! --- 08.03.2015 Uno no empieza saltando desde Holmenkollen. Está claro que primero hay que aprender cierta técnica -quiero pensar- y luego la pone uno en práctica. El otro día salí a esquiar por Solemskogen, un lugar al norte de Oslo. Desde allí un destino popular es la cabaña de Lilloseter. El caso es que mis compañeros me propusieron una vuelta circular en lugar de un "ir y volver". Como no conocía el camino acepté. No está de mal enterarse de nuevas rutas.
Al rato llegamos a Linderudkollen hoppsenter, centro de salto de Linderud. No pensé que hubiera nadie hasta que oí el "ploff" característico de un aterrizaje con esquíes anchos - los de salto. Y eso es lo que vi:
Impresiona, ¿eh? Desde abajo quizás no asuste lo suficiente. Lo más llamativo es que los deportistas estaban entre los 9 y los 14 años. Supongo que es la edad adecuada de hacer locuras, antes de que a uno le llegue la razón, jejeje.