Por primera vez este año --- 10.02.2014Despacito, pero sin pausa. Así pasa el tiempo. Un segundo... un minuto... así un un día tras otro, semana tras otra. Ha costado casi seis semanas -41 días-, pero por fin hemos vuelto a ver el SOL.
Para ser correcto del todo diré que el SOL se pudo ver durante unos 5 minutos la semana pasada, creo recordar que el martes. Es decir el día número 37 del año.
En Oslo estamos teniendo un invierno de pena. Las temperaturas suben, la niebla se apodera de la ciudad y la lluvia se come mientras escribo la poca nieve que queda. A
+4ºC es como si estuvieramos en noviembre. ¡Me pone de mal humor!
Por lo menos la solución es relativamente sencilla: basta alejarse un poco de la ciudad para encontrar ambientes en los que el invierno es la estación que reina y el otoño es cosa del pasado.
Es en uno de estos sitios donde he estado de excursión el fin de semana. La temperatura ha sido bastante constante. Unos
0ºC tanto de día como de noche, bastante agradable si no hace viento :-)
La nieve que cae a esa temperatura forma grandes copos que -además- son bastante pegadizos. No es raro verlos en los cristales de las ventanas. El proceso de formación de un copo de nieve es bastante más complicado de lo que uno se piensa. Tanto la temperatura, como la humedad, el viento, etc tienen un papel influyente en dicho proceso.
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